He perdido la cuenta de las veces que me han pedido que escriba literatura erótica o pseudo pornográfica…. Sí, he perdido la cuenta. En serio no me lo he llegado a plantear aún ya que con todos los proyectos que tengo para acabar, meterme en uno nuevo sería abarcar demasiado. Pero, ¿Sería capaz de escribir literatura erótica como la que nos encontramos en los números uno de las listas de ventas de libros? Lo siento, pero lo dudo.
Tengo un gran problema con la literatura de genero erótico, lo que a mi parecer es un submundo lleno de tabúes, machismo, tópicos, una visión de los roles masculinos y femeninos un tanto arcaicos.
¿Necesita una mujer un hombre para abrirse sexualmente? No creo en ello, no creo en la necesidad de que sea justamente el hombre el que constantemente alecciona a una pobre mujer mojigata. Somos libres, podemos ser nosotras mismas sin avergonzarnos de nuestras necesidades o de cómo las ejecutamos. Lo siento, pero soy capaz de ser una pervertida sin que un varón me dé lecciones. Con ello no digo que no puedan darme lecciones, más bien digo que no es necesario, que soy mayorcita, sé lo que quiero y que nosotras podemos ser las que pervertimos.
¿Necesita el sexo para la mujer un trasfondo romántico? No creo en ello, todos sabemos que con amor o simplemente con una pareja estable el sexo es mejor, puedes experimentar más, la confianza es un grado….pero señores, no es estrictamente necesario que lo uno vaya de la mano de lo otro. Además no es la realidad, ¿acaso no podemos satisfacer nuestros deseos sin la a veces carga que llevan las mujeres de la búsqueda del hombre perfecto?
Podrían escribirse mil historias eróticas donde el amor no exista, en las que los roles de hombres y mujeres sean semejantes, o quizás unos más dominantes que otros… pero no que el pan nuestro de cada día sea la sumisión de la mujer.
La literatura erótica me hace reflexionar mucho sobre la situación actual de nuestro sexo, sobre la cantidad de tabúes que tenemos, lo poco libres que nos dejamos ser y como pese al tiempo, a los avances de la mujer en el último siglo caemos en los mismos roles de siempre. ¿Por qué no somos más valientes y sinceras con nosotras mismas? El sexo es el sexo y el amor es el amor, porque seamos mujeres no tenemos que justificar uno con otro.
¿Escribiré literatura erótica? Probablemente en algún momento me pique el gusanillo, pero no estará en los cánones, será bastante más feminista y más real. Todo ello me lleva a pensar que el día que me decida no os gustará. ¿Escribiré literatura erótica? Sí y con todas las consecuencias.